De la CDMX a NY. Paralelismos entre Efraín Huerta y Lorca.
- pablovsalazar
- 2 dic 2022
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Efraín Huerta nació en Guanajuato en junio de 1917, sin embargo, hacia 1931 toda su familia se trasladó a la Ciudad de México donde comenzó sus estudios de Derecho, no obstante, solo estudió dos años prefiriendo la práctica periodística a través de crónicas, columnas de política y críticas cinematográficas. El autor perteneció a la denominada generación de Taller (revista literaria que agrupó, entre otros, a Octavio Paz, Rafael Solana y Neftalí Beltrán), donde se publicó una gran cantidad de su obra, colaborando de manera simultánea en varias publicaciones de distintos caracteres no estrictamente literarios (UNAM, 2022).
De 1935 a 1992, Huerta publicó una veintena de poemarios en donde las expresiones de odio y amor a la ciudad reverberan toda la obra, destacando al efecto la popularidad de los poemas "Declaración de odio", "Declaración de amor" y "Los hombres del alba", pertenecientes al libro que lleva por título el de este último poema y publicado en 1944 (Del Carmen, 2016, p. 115).
Declaración de odio, grosso modo es una alegoría sobre la podredumbre y la belleza de la Ciudad -más disertación que reclamo-, con énfasis en las peripecias de lo que Lozoya (2007) denomina una metrópoli que crecía vertiginosamente y traía cambios no sólo en la percepción del espacio, sino en las sensaciones que éste generaba.
Por su parte, Federico García Lorca (1898-1936), es un destacado poeta, dramaturgo y narrador que forma parte de la Generación del 27 en el contexto de la literatura española del siglo XX (Cervantes, 2022). Dentro de su gran producción literario tenemos a Poeta en Nueva York (1940), el cual siguiendo a Predmore (1970) resulta ser un libro sumamente difícil de interpretar, no solo por su novedoso lenguaje poético sino también por el carácter problemático, considerando entre otras cuestiones que la obra es una puesta en contacto entre el mundo poético de Lorca con el mundo poético de Nueva York, a manera de prosopopeya sobre la monstruosa ciudad occidental contemporánea.
Ahora bien, para estar en posibilidad de exhibir los paralelismos sugeridos, se utilizará como marco de referencia algunos elementos de la propuesta de Camacho (2013) para reconocer la estructura textual de un poema, es decir: el significado de las palabras, la identificación del hilo conductor del texto y la construcción de un significado global; el primer aspecto alude a la semántica de las palabras y su uso eufemístico, el segundo a la interrelación de los elementos descriptivos de la obra y el tercero a lo que pretende decir el texto más allá de lo descrito.
Respecto al último aspecto Lozoya (2007) ofrece una adecuada referencia del significado global del poema de Huerta, al indicar que éste supo tomar el pulso frenético de la urbe que iniciaba la travesía hacia la incierta modernidad, además de reivindicar la realidad de la metrópoli desde las entrañas, describiendo así una ciudad oscura que se odia y se desea, que ofrece sitios oníricos de placer, belleza y repulsión, tal como se desprende de los siguientes versos: “Ciudad tan complicada, hervidero de envidias, / criadero de virtudes desechas al cabo de una hora,/ páramo sofocante, nido blando en que somos / como palabra ardiente desoída, / superficie en que vamos como un tránsito oscuro” (Huerta, 2011, p.12).
Sobre el hilo conductor del texto, tenemos que la exposición de los elementos descriptivos es consistente con la transición del odio al amor, como se observa en el verso 29 que reza “Ciudad negra o colérica o mansa o cruel”, con al paso al verso 51 que contrasta los sentimientos: “Te declaramos nuestro odio, magnifica ciudad”; para concluir con protesta de “…amarte mañana cuando el alba sea alba” (Huerta, 2011, pp.11-13).
En cuanto al significado de las palabras, se advierte una gran diversidad de sustantivos como: carne, cadenas, gritos, envidia, miseria, basura; los cuales se conjugan con adjetivos calificativos de corte despectivo como; sucio, traidor, turbio, podrido; y afectivo como: inmensa, primorosa, limpia; y que, con el constante uso de sintagmas posesivos y demostrativos, revela una sensación paradójica de asco, amor y pertenencia, consolidando así una prosopopeya que exclama la repulsión y el amor que se profesan, quizás por resignación, quizás por esperanza. Finalmente se destaca el uso de los homosexuales, los perros y las prostitutas como paroxismos para exaltar el ambiente lúgubre de la escena descrita por Huerta.
Ahora bien, con relación al universo lorquiano, siguiendo a Predmore (1970) tenemos que la travesía neoyorkina de Federico García, no sólo abrió los ojos del poeta a un mundo nuevo, sino que acabó sirviéndole de poderoso símbolo para expresar emociones que ya le hostigaban mucho antes de pisar el suelo de Manhattan, por ejemplo, le llama la atención su suciedad, que suele representar en versos como el siguiente: “La aurora de Nueva York tiene / cuatro columnas de cieno / y un huracán de negras palomas / que chapotean las aguas podridas (García, 2007, p. 121).
En el mismo sentido, destaca Lorca el generalizado fomento a la crueldad como se desprende de la Oda al Rey del Harlem al indicar que “los niños machacaban pequeñas ardillas / con un rubor de frenesí manchado” (García, 2007, p. 109). Asimismo, sentía especial deprecio por la riqueza y el poder inhumano que puede representar como se observa en los versos de Danza de la muerte que rezan: "Este columbario que pone los ojos amarillos. / De la esfinge a la caja de caudales hay un hilo tenso / que atraviesa el corazón de todos los niños pobres” (García, 2007, p. 113).
Resultan interesantes también algunas referencias a los habitantes que evidencian claras similitudes en el discurso, por ejemplo, en oda a Walt Whitman Lorca alude con despreció a los “Faeries de Norteamérica… Jotos de Méjico… ¡Maricas de todo el mundo, asesinos de palomas!” (García, 2007, p. 137); mientras en Huerta alude a la “ciudad donde caben los perros, la miseria y los homosexuales, las prostitutas” (Huerta, 2011, p. 13).
En ese tenor, siguiendo a Predmore (1970), lo dicho hasta aquí sugiere que la imaginación de Lorca había convertido a Nueva York en un enorme escenario para la exhibición de la cara más fea del mundo moderno: su creciente deshumanización e injusticia. Una parte esencial de Poeta en Nueva York constituye, en una forma u otra, una protesta contra la monstruosa urbe.
Conclusión
Con base en las consideraciones anteriores las similitudes se hacen latentes e incluso, siguiendo a Kerik (2015), parece que la obra de Huerta atiende al reclamo lorquiano en contra del mundo norteamericano transfiriéndolo al escenario de la Ciudad de México, como si la voz que denuncia la vida urbana de una ciudad de Norteamérica incluyera una denuncia a la norteamericanización de la Ciudad de México, la cual se ve robustecida con la acusación de las condiciones propias de la marginación urbana que describen el submundo del crimen, la pobreza, el hambre, la soledad, y el comercio sexual, como realidades sociales cotidianas en ambas urbes.
Así pues, mientras que Lorca denunció en su visión de Nueva York una ciudad que reflejaba en sus extremos, rasgos que podrían pertenecer a cualquier ciudad del mundo en el tránsito a la industrialización y el capitalismo, Huerta denuncia en la Ciudad de México el avance del fenómeno industrial, cultural y comercial con todas las consecuencias propias de la explosión demográfica, como la marginación urbana; sin embargo se presenta una diferencia sustancial, ya que mientras Lorca es solo espectador y crítico, Huerta es parte y estandarte en dicho escenario; por lo cual, se advierte que efectivamente la obra del poeta de Guanajuato es un contrapunto de la descripción neoyorquina de Lorca, sin embargo es también una aporía que envuelve la complejidad de amar aquello que se aborrece.
Referencias
1. Camacho M.L., Et.al. (2013). Una estrategia para comprender la poesía de Luis de Góngora y Argote (y la de sus contemporáneos) Primera parte Proyecto UNAM-DGAPA-PAPIME PE401810.
2. Cervantes Virtual (2022). Federico García Lorca. https://www.cervantesvirtual.com/portales/federico_garcia_lorca/
3. Cultura UNAM (2022). Poesía Moderna, Efraín Huerta (1914-1982). http://www.materialdelectura.unam.mx/index.php/poesia-moderna/16-poesia-moderna-cat/34-009-efrain-huerta?start=1
4. Del Carmen Rangel López, A. (2016). “Una negra sonrisa de alegría”. Consideraciones en torno a algunos momentos de la obra de Efraín Huerta. Confluencia, 32(1), 114–128. http://www.jstor.org/stable/44077466
5. García Lorca, F. (2007), Poeta en Nueva York. Ed, Porrúa, México.
6. Huerta, E. (2011). Declaración de odio (1944, Los hombres del alba). Argumentos (México, DF), 24(66), 9-13.
7. Kerik Rotenberg, C. (2015). La Ciudad de México en la poesía moderna mexicana: pautas de representación poética de la Ciudad durante el siglo XX. COLMEX, México https://repositorio.colmex.mx/downloads/xg94hp87z?locale=en
8. Lozoya Saldaña, M. (2007). La urbana pasión de Efraín Huerta. https://repositoriodigital.ipn.mx/bitstream/123456789/24893/1/7-PasionUrbanaEfrainHuerta.pdf
9. Predmore, R. L. (1970). Nueva York y la conciencia social de Federico García Lorca. Revista Hispánica Moderna, 36(1/2), 32–40. http://www.jstor.org/stable/30203090

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